Por Ramón Tamames.
Miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
El título del presente artículo es idéntico al que Paul Gauguin dio a un cuadro que pintó en Tahití, en 1897, y que el autor vio en 1994, muy ampliado, al llegar al aeropuerto de Papeete: “Este será el título de un libro mío, alguna vez…”, pensé en la ocasión. Y así ha sucedido: en la ponencia que ayer defendí en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, traté, precisamente, de contestar a las tres preguntas que encabezan este artículo, que es una síntesis del propio libro imaginado hace 22 años.